Las cremas y serums faciales ayudan a proteger la barrera natural de nuestra piel, hidratando en profundidad y previniendo de posibles arrugas, deshidratación y sequedad. Activos como los proteoglicanos, ácido hialurónico, ceramidas, glicerina, son componentes de las cremas hidratantes faciales que ayudan a la protección de la piel restableciendo la barrera cutánea y protegiendo de la deshidratación y el envejecimiento. Después de la limpieza, podríamos decir, que la hidratación es un paso básico en la rutina diaria, además de imprescindible para tener un aspecto saludable. Sabemos que una piel necesita un extra en hidratación, cuando hay una sensación de tirantez, picor e incluso en las líneas de expresión se remarcan más con un tono apagado. Todas las pieles, incluso las pieles deshidratadas, necesitan un cuidado facial de limpieza correcto e hidratación es lo mínimo para que no se dañe la piel.
Rutina diaria en hidratación.
Tras la limpieza con un limpiador con base de aceite que aporte confort a la piel podemos emplear un tónico adecuado que equilibre el pH de la piel, ayudando a cerrar poros. A continuación aplicaremos un serum y/o crema hidratante adecuado a nuestro tiempo de piel y restableza los niveles de hidratación.
Hay muchas cremas y serums hidratantes que además tienen propiedades reafirmantes, antiarrugas, reparadoras y protectoras que previenen de la sequedad y el envejecimiento facial. Debemos elegir nuestra crema o serum hidratante dependiendo de nuestra edad, actividad y estación del año así como del tipo de piel que tengamos.
- Hidratación en texturas serums: Hablamos de un tipo de hidratación que gusta en todo tipo de pieles sobre todo las mixtas con tendencia a grasa ya que aportan hidratación sin dejar residuo, no obstante, también las pieles secas pueden utilizar serums hidratantes, pero quizás, tendrán que aportar más confort posteriormente, o utilizar una textura serum pero más untuoso.
- Hidratación en textura crema ligera o textura crema fluida: Las ligeras serían más para pieles mixtas o grasas pero que necesitan hidratarse después de su cuidado de limpieza, sin embargo, las texturas ricas, son más beneficiosas en pieles apagadas, secas e incluso atópicas.
- Hidratación con mascarillas: En éste caso seria una hidratación semanal o según la piel más a menudo. Se aplican dejando actuar y se pueden retirar posteriormente, aunque también podrían aplicarse en la noche y dejar actuar el producto retirando el exceso.
Uno de los activos por excelencia en hidratación, es el ácido hialurónico, también hay extractos marinos y otros activos menos conocidos, pero el más demandado para la hidratación es ése.
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